Educación archivos - Página 3 de 7 - IDESA

Búsqueda avanzada

  • FILTRAR POR ÁREA DE ESTUDIO

Educación



Más de la mitad de los jóvenes no tiene capacidades de lectura

La aplicación de pruebas educativas motorizó polémicas a pesar de que se trata de una herramienta de uso habitual en otros países al permitir una mejor definición de las políticas. Entre las evidencias que explicitan estas mediciones aparece que mientras la inversión en educación aumentó, el aprendizaje de los alumnos decreció. Esto demuestra que, más prioritario que seguir aumentando el presupuesto educativo, es cambiar los estilos de gestión de las escuelas.     

(más…)

VER

Se triplicó el costo por egresado universitario en una década

En los últimos años las universidades públicas recibieron importantes aumentos de presupuesto público. Este esfuerzo no fue correspondido con más egresados universitarios ni con mejoras significativas en la calidad. En lugar de jornadas de protestas, la comunidad universitaria debería impulsar la reflexión y la autocrítica para detener el derroche de fondos públicos y recuperar la calidad.  

(más…)

VER

8 de cada 10 nuevos alumnos optó por la educación privada

En un país donde prevalece un amplio consenso en favor de la escuela pública sorprende que la mayoría de las familias opten por la educación privada. No basta con aumentar el presupuesto educativo o el salario de los maestros. Es ineludible revisar las reglas del trabajo docente para premiar la responsabilidad y los logros de aprendizaje y desalentar el ausentismo y la falta de compromiso. La crisis educativa posiblemente sea la peor herencia que reciben los gobiernos entrantes.

(más…)

VER

6 de cada 10 jóvenes no termina la secundaria a tiempo

El oficialismo promovió la sanción de una ley que promete gratuidad e ingreso irrestricto a la universidad. El acto, además de demagógico, distrae la atención de las verdaderas barreras que impiden el acceso a la educación superior. Más de la mitad de los jóvenes se quedan a mitad de camino por la mala calidad de la educación media. Las soluciones no pasan por relajar exigencias académicas en la universidad sino por cambiar los estilos de gestión en la educación básica.

(más…)

VER

6 de cada 10 hogares que califican al PROGRESAR no son pobres

El plan Progresar subsidia a jóvenes entre 18 y 24 años con la condición de que estudien. Aunque la meta es loable, la rusticidad de su diseño lo degrada a un mero mecanismo generador de dependencia y cultura por la dádiva. Además de no focalizarse en los hogares más pobres para igualar oportunidades, tampoco incentiva los avances en educación e induce a la inactividad laboral. Sería muy positivo sustituirlo por un sistema moderno de becas de estudio y una política laboral que fomente el empleo juvenil.

(más…)

VER

Para mejorar los resultados educativos es clave generar una correcta cultura de evaluación docente

La educación es un elemento clave para eliminar la pobreza y disminuir la exclusión social. En los últimos años, la inversión en educación ha crecido de manera significativa, superando la meta del 6% del PBI fijada en la Ley de Financiamiento Educativo. Sin embargo, las evaluaciones internacionales señalan que los alumnos argentinos muestran severos y crecientes déficits en su formación. Para achicar la brecha entre recursos invertidos y resultados alcanzados, hay que lograr una sensible mejora en la calidad y gestión educativa. Un instrumento de importancia estratégica es la evaluación docente. En los países más avanzados, ella forma parte de la cultura de la comunidad educativa, pero en la Argentina el proceso es muy incipiente. El presente número de Empleo y Desarrollo Social ofrece algunas recomendaciones para estimular la evaluación docente y así mejorar los resultados educativos.

(más…)

>

La mitad de los jóvenes vive en contextos educativos adversos

La igualdad económica es una aspiración muy deseada en Argentina, pero está lejos de dejar de ser una mera declamación. La experiencia internacional muestra que igualdad y crecimiento económico no se contradicen sino que se potencian en la medida que se adopten estrategias correctas. Además de redistribuir ingresos en favor de los más pobres son imprescindibles políticas que promuevan la educación, el trabajo productivo y la participación laboral de las mujeres de bajos ingresos.      

Un tema de gran interés en la actualidad es el de la desigualdad. Los análisis más conocidos son los del economista francés Thomas Piketty quien señala que la muy alta y creciente concentración de riqueza en una ínfima porción de la población genera una economía patrimonialista que sofoca la igualdad de oportunidades y el progreso basado en el talento y la innovación. Su recomendación es crear un impuesto global a las grandes riquezas.

Otro estudio publicado recientemente por la OECD analiza la relación entre desigualdad y desarrollo de capacidades de las personas. El principal hallazgo es que en los países con alta desigualdad los hijos de padres con bajos niveles de educación desarrollan menos capacidades laborales y sociales que en los países más igualitarios. En otras palabras, en países con alta desigualdad la educación de los padres tiene una incidencia decisiva en la formación y el futuro laboral de los hijos, limitando la igualdad de oportunidades. De aquí que la recomendación sea poner el foco en las familias con padres de bajos niveles de educación buscando promover la participación laboral femenina y el desarrollo de centros de cuidados infantiles. 

En función de estos antecedentes resulta pertinente analizar los niveles de educación de los padres en los hogares de la Argentina. Según datos oficiales del INDEC, entre los jóvenes menores de 18 años de edad de la población urbana se observa que:

  • El 27% tiene al menos uno de los padres con educación superior a secundaria.
  • Otro 25% tiene al menos uno de los padres con educación secundaria completa.
  • El 48% restante tiene ambos progenitores con educación inferior a secundaria.

Estos datos muestran que en la Argentina la mitad de los jóvenes tienen padres con escasos niveles de educación. Dentro de las categorías que utiliza la OECD, estos jóvenes serían considerados individuos que se crían en contextos educativos adversos. Esta situación, junto al hecho de que la Argentina presenta mayores niveles de desigualdad que los países desarrollados, permite predecir que mucha de esta gente en el futuro presentará déficits de formación y, por lo tanto, limitadas posibilidades de aportar al desarrollo económico del país.

En economía, tradicionalmente se consideró que tender a redistribuir progresivamente ingresos podía atentar contra el crecimiento. El argumento parte de considerar que los segmentos de mayor nivel de ingresos tienen mayores tasas de ahorro, lo cual contribuye a financiar las inversiones necesarias para expandir la producción. Bajo esta lógica, redistribuir ingresos a favor de los grupos sociales más postergados aumentaría el consumo pero reduciría el ahorro y la inversión, hipotecando el futuro. Esta visión está cuestionada cuando la igualdad contribuye a la generación de capacidades productivas y participación social en toda la población aumentando la potencialidad de desarrollo.

Para lograr que la mayor igualdad sea fuente de crecimiento económico no alcanza con aplicar impuestos progresivos y redistribuirlos en favor de los más pobres. Importancia decisiva tienen las políticas educativas, laborales y de asistencia social. Factores claves son escuelas de alta retención y calidad de los aprendizajes, un mercado laboral fluido que facilite la incorporación de los jóvenes y las mujeres, y planes asistenciales que promuevan la planificación familiar para que la maternidad no interrumpa ni el desarrollo escolar ni los primeros pasos en el mundo laboral de las mujeres. Por el contrario, si la política se limita a mejorar los ingresos de los segmentos más postergados sin promover mejores desempeños educativos ni mayor actividad laboral el resultado será el estancamiento. Esto debido a la falta de competencias laborales y a la dependencia del asistencialismo que contamina la dinámica política con prácticas clientelares.

La Argentina tiene una alta vocación por construir una sociedad integrada e igualitaria, pero para concretar este anhelo no alcanza con redistribuir ingresos en favor de los más pobres. Para ingresar a una senda de progreso con inclusión social es imprescindible fomentar de manera sostenida y homogénea entre toda la población la cultura de la educación, el esfuerzo y el trabajo productivo.   

VER

Un nuevo cargo docente por cada nuevo alumno

El aumento de la inversión pública en educación no se tradujo en mejores resultados. Esto denota enormes deficiencias en la planificación y la gestión de la educación. Mientras que un número creciente de familias opta por las escuelas privadas, en las escuelas públicas se siguen contratando docentes sin sentido estratégico. Más prioritario que aumentar los recursos es replantear las formas con las que se están administrando. Para ello es imprescindible establecer reglas que premien el compromiso de los docentes con la formación de los alumnos. 

(más…)

VER

Asignación Universal por Hijo mejoró muy poco la escolaridad

La AUH goza de amplios consensos pero, según datos oficiales, luego de cuatro años de implementada está lejos de haber logrado los resultados esperados. La reducción en la deserción escolar es modesta y no está concentrada entre los hogares beneficiarios del subsidio. El problema no se origina en su concepción sino en la vetusta gestión que aplica la ANSES. La solución comienza por descentralizar el control de condicionalidades de la AUH en las provincias que son las responsables de administrar las escuelas.   

(más…)

VER

Gasto salarial en educación 50% mayor que en países avanzados

En términos de PBI, la Argentina invierte muchos más que los países avanzados en personal de educación. Pero los pobres resultados que obtiene sugieren que el principal desafío pasa por aumentar la calidad de la gestión educativa. Algunos países de la OECD muestran que se puede mejorar los niveles de educación con un número pertinente de educadores, bien pagados y calificados, reglas que estimulen el buen desempeño, más insumos y mejor infraestructura. 

(más…)

VER