Empleo
La información oficial del INDEC alerta sobre un creciente deterioro de los indicadores laborales. Esto no se exterioriza en un aumento de la tasa de desempleo abierto sino en una creciente proporción de personas en edad activa que deciden retirarse del mercado de trabajo. El fenómeno se explica por la falta de oportunidades laborales debido a la escasa creación de empleos de calidad. Por eso, más importante que el conflicto con los fondos “buitres” es rectificar las políticas públicas que sofocan la productividad y la generación de empleos de calidad.
VERLa sanción de la ley de agravación de penas por no registración laboral y reducción de cargas sociales reconoce que los avance en formalización laboral en Argentina son tímidos. Uruguay, en cambio, logró bajar la incidencia del empleo no registrado de manera mucho más acelerada. La principal diferencia es que en Uruguay formalizarse cuesta menos y reditúa más, tanto a los trabajadores como a las empresas.
VERAnte el estancamiento en la producción, los empleos de baja calidad son el principal paliativo al que accede la gente frente a la insuficiente generación de empleos asalariados registrados en el sector privado. Esta es la consecuencia de instituciones laborales rudimentarias que basan la protección del trabajador en la agudización de los castigos a los empleadores y el abandono del rol del Estado en la construcción y administración de una efectiva red de protección social.
VEREl 1º de Mayo es una ocasión propicia para reivindicar el trabajo y asumir con autocrítica que, más allá de las declamaciones, todavía son mayoría las personas en edad de trabajar que tienen vedada la oportunidad de acceder a un empleo de calidad. Esta es la consecuencia de perseverar durante décadas con regulaciones laborales que desalientan la generación de empleos. Ante la contundencia del fracaso se necesita un cambio de paradigma en la concepción de las instituciones laborales en lugar de reiterar viejas recetas.
VERLas principales fuentes de progreso y bienestar son los aumentos de productividad que sustentan mejoras de las remuneraciones y la masiva generación de empleos de calidad para que las familias tengan más miembros generadores de ingresos dentro del hogar. Por eso, es fundamental que las instituciones laborales y la política asistencial sean muy sensibles a los incentivos en favor de la maternidad responsable y la activación de la mujer para su incorporación en el mercado laboral.
VEREn el marco del aletargamiento en el nivel de actividad económica se hacen más explícitas las negativas consecuencias sociales derivadas de la baja calidad institucional. Testimonios concretos son las barreras que discriminan contra la inserción laboral de los jóvenes, especialmente las mujeres. Mientras que en los países más avanzados el progreso social se basa en altas tasas de empleo juvenil y femenino, en la Argentina el ingreso de los jóvenes está fuertemente condicionado por baja formación, regulaciones laborales e impositivas onerosas y burocráticas, y ausencia de estrategias para promover conductas reproductivas responsables.
VERAnte el persistente drenaje de reservas las autoridades anunciaron una nueva política cambiaria. Junto con ello, se dispuso la instrumentación del programa Progresar con el objetivo de paliar la marginalidad que sufren millones de jóvenes. Se sigue sin tomar conciencia de que la escapada del dólar refleja el exceso de gasto público muy mal administrado y que, por lo tanto, no habrá solución sin una profunda transformación del sector público. Pero más grave aún es inducir a miles de jóvenes, en el inicio de su vida productiva, a la dependencia del asistencialismo.
VEREl nuevo gabinete debuta impulsando otro aumento de impuestos. Aunque el argumento oficial es que se busca castigar consumos “suntuarios” que drenan divisas, en realidad es una continuidad del proceso que llevó la presión tributaria a niveles récords. Para reducir de manera genuina el déficit fiscal, la inflación y la fuga de divisas una estrategia alternativa es comenzar a desmantelar el perverso mecanismo de subsidios económicos a empresas públicas y privadas. Esto, además, permitirá preservar muchos empleos de calidad.
VEREl aumento del desempleo se explica por la modesta generación de empleos frente a una creciente demanda de la gente por nuevos puestos de trabajo asociada al deterioro que provoca la inflación en los ingresos familiares. Hasta el año 2008, hubo alta generación de empleo que se sustentó en la licuación de costos laborales producida por la mega devaluación del año 2002. Pero la capacidad de generación de nuevos empleos privados se fue debilitando por la multiplicación de trabas y sobrecostos producto de malas decisiones tomadas por los tres poderes del Estado.
VEREn las instituciones laborales y educativas subyace un gran celo frente a la posibilidad de la incorporación temprana de los jóvenes al mundo del trabajo. El principal argumento es que lo único valioso para un joven sería concentrarse en estudiar. Sin embargo, las mejores prácticas en el ámbito internacional demuestran que el empleo juvenil es un medio para mejorar la formación de los jóvenes y motorizar su progreso. La clave del éxito es incorporar en la secundaria contenidos de educación para el trabajo y promover una inserción temprana en una empresa.
VER