Para crear empleo de calidad se necesita un sector público que acompañe la generación de empleo permitiendo la producción y la inversión. Para ello es necesario avanzar en el ordenamiento integral del estado, ordenando las finanzas públicas, el sistema previsional y el sistema tributario. A su vez, se necesitan reformas en las instituciones laborales, principalmente modernizando la vetusta legislación laboral.





